La jornada voladora de este sábado ha sido de las que crean afición.
Las 10:00 en LEIG y la Patrulla Avispa lista para una nueva misión. Hoy vamos a Bellvei.
El día está interesante ya que se presenta un poquito removido en altura, cosa que siempre añade algo de emoción para un trayecto relativamente corto como el de hoy.
Todos ya a punto y servidor que llega en el último momento pero presto a unirme al grupo. Esta vez seremos cuatro avispas (Armand y Juan Carlos de gol norte y Enric y Jordi de gol sur) y un avispón ya que Jaume viene con su TEXAN.
Las máquinas arrancan sin problemas (todas por fin!) y back-track a la 35 por asfalto. El espacio está muy transitado a esta hora y tenemos que ir sorteando las Cesna estacionadas delante de nuestros hangares, los veleros con su remolcador evolucionando a su "aire" por la zona, así como varios tráficos más en tomas y despegues ...ufff... menos mal que como radio-operadores no nos gana nadie ... o será que causamos cierto respeto y/o pánico cuando salimos en masa...!
Al fin todos de acuerdo y la secuencia de despegue tiene lugar sin novedad, los cuatro autogiros a la vez en cabecera 35.. IMPRESIONANTE! (el público vitoreando, lluvia de confeti y serpentinas, gorras al aire, etc)
Enfilamos rumbo sur y en 35 minutos estamos todos aterrizando en el campo del Baix Penedès.
Durante el viaje nos hemos encontrado con un paisaje espectacular, sobrevolando bosques, campos de cultivo, viñas, torreones de castillos en ruinas, trazados de autopista, tren, la reciente línea de alta velocidad con el AVE "volando" sobre la vía y que nos deja atrás como si estuviésemos haciendo una estacionaria!, y al fondo, a tiro de piedra, el horizonte de nuestro Mediterráneo en calma.
Los compañeros de Bellvei nos reciben con aclamaciones y vítores. Después de firmar unos cuantos autógrafos para el club de fans nos dirigimos a tomar algo calentito para recuperar el riego sanguíneo y ponernos en forma para la vuelta.
En pocos minutos estamos ya haciendo cola para entrar en la 22 e ir saliendo, esta vez de uno en uno por cuestión de espacio, hacia nuestro campo de origen en Igualada.
A cinco minutos del campo de nuevo tenemos que coordinar nuestros movimientos con los tráficos de veleros y escuelas que están copando el espacio aéreo pero, como ya he dicho, somos auténticos expertos en comunicaciones y maniobras de aproximación, así que todo a pedir de boca.
De regreso a la colmena un día más. Misión cumplida y sin novedad.
Será hasta la próxima amigos!
EC-ZRC
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